domingo, abril 15, 2007

El tiempo y June

My back pages
(cuelgo este video que he hecho a toda, porque YouTube se oye mejor que evoca)



Me atrevo con esta maravillosa canción de Bob Dylan, versioneando la versión que sus amigos tocaron en su 30 cumpleaños en escena. Entonces, cantaban Roger McGuinn, de los Byrds, Tom Petty, Neil Young, Eric Clapton, el propio Dylan y mi amado George Harrison. Hoy sólo canto yo, eso que salís ganando. Me atrevo hasta a imitar los solos de guitarra de Clapton y Young, le añado mi inevitable soplido a la armónica de MI y unas armonías vocales que me han quedado de lo más pintonas, aunque esté mal que yo lo diga. La canción es, sencillamente, formidable y la letra, una de las grandes del más grande letrista, en mi opinión. Te aconsejo, si entiendes un poquito de inglés, que la escuches leyendo la letra, verás qué maravilla. Es larga, pero verás que se escucha sin exigirte nada y se disfruta, muy fácilmente su estructura uniforme de 8 estrofas, 8, si el tiempo y la autoridad lo permiten. Dedico esta canción, porque sé que le gusta, con todo el cariño que soy capaz de hacerlo a mi querido amigo Buch, que cumplió años hace poco y no tuve el detalle de felicitarle. Espero que no te vengues olvidando que tu ahijada se va a Suiza dentro de dos semanas, porque cuenta con que su padrino le unte bien. Un abrazo, viejo amigo. Y felicidades, claro.

El día que me encontré con June, diez años después, tuve la sensación de que el tiempo se había detenido y de que mi mundo, desordenado y caótico en la última década, pero inactivo, entraba de nuevo en erupción. Así que, después de los saludos rituales y de los caray cuánto tiempo y todo eso, le dije:

- ¿Sabes, June? Tengo la sensación de que al tiempo se ha detenido y de que mi mundo, desordenado y caótico en la última década, pero inactivo, entra de nuevo en erupción.

Ella me miró ladeando la cabeza y, con una sonrisa conocida, acercó su mano a mi mentón, lo acarició un poco y sus dedos agarraron mi oreja.

- Caray, es verdad... el tiempo parece haberse detenido: hacía tiempo que no escuchaba un tópico tan elaborado.

Sí. Y si soy el Rey de los Tópicos, ¿qué pasa? Soy Nobili Strangelo, el último de los Strangelo de Odesa, la ciudad estado escondida en medio del Ignoto Mar Menor.

Sitúense, damas y caballeros. El Mar Menor, como todo el mundo sabe, se divide en cuatro mares: El Habitual, el Veraniego, el Cadencioso, el Oblicuo y el Ignoto. Son cinco, porque el Ignoto, como su propio nombre indica, no entra en los rankings. Y es ignoto, además.

Pues bien, en mitad de este mar ajeno, donde sus aguas se vuelven para no volver, allí, detrás de la Playa Más Fea del Mundo, justo detrás de la la montañita más desgraciada que existe, se alza, orgullosa, la ciudad de Odesa, donde los Strangelo (pronúnciese “estrányelo”) hemos pululado a nuestro antojo y gobernado despótica e injustamente los últimos cuatro siglos.

Mi padre, y el padre de mi padre, y el padre del padre de mi padre y así, han sido gobernantes caprichosos y mendaces, prohombres sin sentido alguno de la medida, el ridículo o la justicia. Hombres carentes de piedad e inteligencia, memos de estado cortos de miras, abortos de políticos, mequetrefes de cojones dudosos y reyes absolutos de mi pobre ciudad. Durante años, la única preocupación de mis ancestros fue encontrar una muchacha de caderas prominentes y pechos abundantes, capaces de parir y alimentar a la siguiente y lamentable generación. Así fue durante años. La población de Odesa, ignota como su mar y endogámica como los más endogámicos que puedas imaginar, está formada, a partes iguales, por cretinos integrales y mamarrachos disciplinados (parecido al resto de España, vamos) y así, ignorantes e ignorados, se reproducen y viven felices en su idiocia. El sueño de todos es ser padres de una muchacha culona y tetoncilla, que sea capaz de atraer al siguiente príncipe Strangelo. Porque los Strangelo debemos maridar con moza gentil y odesana.

Yo fui el último en nacer así. Mi madre... no soy capaz de recordarla, pues no creo que haya hablado con ella ni una sola vez en mi vida. Desde adolescente viví, eso sí, rodeado de mujeres que se peleaban por agradarme y servirme. Y por satisfacerme.

No tuve hermanos. Mi abuelo y mi padre, recién ascendido éste al trono por abdicación de aquél (abdicación que se produjo con una pistola en el pecho sujetada por mi padre, que estaba cansado de ser el heredero eterno), murieron juntos en un accidente aéreo. Resulta que estaban un día subidos a la torre del castillo, pedos perdidos, cantando a voz en cuello canciones de Raphael y yo les empujé, con la mala suerte de que se cayeron hacia el lado de fuera. La torre daba a un encantador acantilado. Era una caída de 250 metros, pero en la caída no les pasó nada, de verdad, porque yo les oí gritar todo el rato, lo que indica que, mientras caían, estaban vivos. Lo malo fue cuando terminó la caída, que se dieron un golpe tremendo contra las rocas del suelo, no sobreviviendo ninguno de ellos. Es como hacer deporte. No es malo, en sí, lo malo es cuando lo dejas, que engordas. Pues lo mismo cayendo. No te mueres cayendo. Te mueres cuando la caída termina.

Soy, pues, el final de una dinastía, la última esperanza estrangelina. El cabo suelto que nadie ató. Sin padre ni abuelo que me diera la brasa, fui libre y cometí lo que los historiadores de Odesa, la ciudad estado escondida en medio del Ignoto Mar Menor, llamarían un día, asaz periodísticamente, el Error Nobili: contraté una conexión ADSL con Cableuropa, ONO, Murcia, España.

Eh... que no tengo quejas con mi proveedor de internet, por favor, que no se molesten el presidente y el cuadro directivo de ONO, habituales lectores de esta página, y grandes amigos (un saludo, chavalotes) sino que el Error Nobili, fue la conexión con el exterior.

Pero a mí me molaba internet. Podía ver porno, piratear música y pelis... y chatear. Me enganché a un foro de Gran Hermano y a cosas de esas de elfos y hadas y tunantes y homosexuales y un día, se me abrió una ventanita en el ordenador que decía: “June quiere hablar contigo”.

Hablé con ella, claro. June escribía mejor que nadie que yo hubiera conocido jamás. Su literatura tenía una cualidad sexual que para mí era un potente afrodisiaco. Siempre que la leía, ustedes disculparán, pero acababa empalmado como un demonio. A veces escribía relatos eróticos, pero otras, simplemente escribía sobre la tierra, la luna, los pajaritos y las abejas, pero a mí me daba igual: acababa con una enorme erección (no había dicho todavía que tengo un falo formidable, ¿verdad? pues que todo el mundo lo sepa: es asombroso).

Convencí a June para que viniera a verme, lo cual fue realmente difícil: ella, que era de la zona, no había oído hablar nunca del Ignoto Mar Menor. Miento: sí había oído hablar de él, pero en forma de mito, como si dijéramos, tipo el abominable hombre de las nieves, o la chica de la curva, lo que los cursis de hoy llamarían leyenda urbana. Pero le di instrucciones precisas para que llegara a mi ciudad y ella accedió. Y llegó. No era lista, la tía...

No podía permitir que mis súbditos supieran que planeaba verme con una mujer del exterior, así que yo mismo fui a recogerla a la Playa Más Fea del Mundo en mitad de la noche y la llevé a mi castillo y la amé 7 veces por la noche y dos más por la mañana.

- Escóndete, cielo, y no me des mucho la paliza; si necesitas comer, ahí tienes una despensa bien nutrida, pero que no te vea nadie. Si eres buena y te quedas calladita, esta noche te amaré 8 veces.

Y ella se lo tomó mal. Me dijo que no sabía nada de mujeres. Y más cosas. Pero no las voy a decir aquí, porque, ¿qué pensaríais de mí?

Huyó, claro.

Pasé los últimos diez años buscándola, intentando encontrarla entre las piernas de otras amantes, en los gemidos de otras, en los pechos de otras, en los orgasmos de las demás; traté de rememorar el sabor de los besos de aquella noche única en todos los sentidos. En el de la vista, pues jamás existió mujer más hermosa que ella desnuda; el del tacto, pues mis manos nunca tocarán pechos como los suyos; como mi lengua, que jamás escrutó paredes más sabrosas que las de su boca; o el aroma inconfundible de su siempre acogedor sexo. O el sonido inolvidable de sus gemidos de placer.

Jamás la encontré, claro, hasta aquel día en que el destino nos hizo tropezar en la presentación del libro de un amigo común. Quiero decir que no era un gran amigo, ni suyo ni mío, era un amigo muy común, muy del montón.

Aunque June estaba diez años mayor que la última vez que la vi, traté inútilmente, de conquistarla con ese apestoso tópico:

- Parece que el tiempo se ha detenido...

Y es que las cosas son, de común, más sencillas, lógicas y obvias de lo que nos empeñamos en pensar. El tiempo pasa y, afortunadamente, nos deja su huella a cada segundo. Sólo los necios intentan esquivar su inexorable goteo. Sólo un idiota puede pensar que es más joven porque tiene más ilusión, o porque tiene menos barriga, o arrugas; sólo un bobo puede pretender ser más joven de lo que es, del mismo modo que una piedra no puede pretender ser pezón, por más bonita que se ponga. Y, estirando a fondo el argumento, sólo el que tenga por cerebro un conjunto vacío puede asumir que es más joven de lo que es, y pensar que eso es mejor que no serlo.

Sólo un imbécil como yo. Nobili Strangelo, el último eslabón de una cadena corrupta, puede pensar que es bueno conservarse y decirlo en voz alta.

Sólo June podía contestar así:

- Caray, es verdad... el tiempo parece haberse detenido: hacía tiempo que no escuchaba un tópico tan tonto y elaborado. Sólo tú podías hablar así.

(un poco cabrona sí que eres, ¿eh...?)



22 comentarios:

Fugaz dijo...

Y todavía las palabras brillan cuando escribes sobre ella.Y los ojos te hacen chiribitas.

Me encanta entrar aquí y perderme en tus historias.

Un besazo Wolffie

S

Morgana dijo...

Con qué destreza describes siempre las relaciones de tus personajes con las féminas!!!
El destino, que jugadas nos depara a veces…

El tiempo pasa para todos es cierto… lo asumimos así, pero a veces la vista atrás crea una cierta añoranza.

Fantástica canción...
Petonets

el_Vania dijo...

Yiiipes... por poco!!
Wolfferas, buen tema, eh!? Has de mirar que en el solo que hay a mitad de canción hay una nota que se me antoja un poquito "cagú". Por lo demás, la armónica y las voces bien empastadas, y el solo a modo de outro me gusta el efecto que lleva. He estado tarareando y haciéndote coros mientras te escuchaba. Me ha alegrado la mañana, más si cabe, ya que soy el feliz poseedor de entradas para THE POLICE!! Yujuu!!

Sobre el texto... yo pienso que lo bueno es saber estar bien con cada edad, todo tiene su momento y su forma. Yo soy de los que piensan que 1000 veces que volviera a nacer, 1000 veces que haría lo mismo. Y si en plan retrospectivo puedes parecer algo ridículo al verte, en aquella época eras lo más.
Un abrazo y buen arranque semanal!
Salud/OS!

Wolffo dijo...

Fuggie
Sonando: La Yeti - Javier Krahe
Me encanta que vengas, y más todavía que te pierdas. Mola muchísimo cuando una chica me dice; es que me pierdes... Un beso a ti, nena, y mil gracias.

Morganilla
Sigue sonando: La Yeti
... cuando todo da lo mismo
porquyé no hacer alpinismo...
es que es buenísima, la canción que te ha tocado. Así que te parezco diestro, ¿eh? Eh, has escuchado la canción y te ha gustado... Me derrites, Morganilla, me derrites. Un beso. O doce. O...

Vanitas
Sonando: What you're doing - Beatles
jajajajaaa... bronce, muchacho. Como comprenderás, a la velocidad que grabo yo las canciones y con mi poca pericia con la guitarra, que sólo hayas oído una nota cagú es un milagro. Ya sé que has oído más, pero sólo me dices esa, que canta. Me encanta esa canción. Yo fui a ver a Police, más o menos, en el 83 o el 84, cuando todavía se hablaba de "la furia de Sting" en el escenario, porque aún le quedaba un pequeño ramalazo punk. Fue un gran concierto, así que espero que disfrutes lo mismo que disfruté yo. Luego fui a ver a Sting solo unos añós después, cuando acababa de publicar "English man in New York" y fue otro gran concierto, pero faltaba el espíritu rockero de Police.
El tiempo y el paso del tiempo, y como afecta a las personas es una de mis obsesiones. a veces, no sé muy bien lo que escribo sobre ese tema, pero me da igual: me seduce escribir sobre eso.
Un abrazo, txabalotte.

Anónimo dijo...

Uisss... el tiempo...

No puedo escuchar la canción todavía, no quiero despertar a mis leonas, pero en nada lo haré y seguro que la disfrutaré, como siempre... porque para hace lo haces ¿no? para hacernos disfrutar hasta 7 veces en una noche y 2 más en la mañana.

Besos de una maia.

Wolffo dijo...

Wen
Sonando: Victoria - Kinks
Escúchala, porque es buena, en serio, aunque un poco larga, lo reconozco. Pero es muy bonita y alegre.
Y sí, claro, para eso, exactamente, las hago. 7 veces y dos más por la mañana.

Un beso enorme maia

Anónimo dijo...

Ah, but I was so much older then,
I'm younger than that now

Siempre que escucho esta canción me imagino recorriendo la carretera que une L.A. con N.Y. en una Harley. Luego, cuando acaba, me doy cuenta de que es imposible porque no tengo ni idea de montar en moto.

La historia es brillante, especialmente para mí que pasé mi infancia en el Mar Menor y su inacabable falta de profundidad amenizada con su variedad de medusas. Nunca imaginé que existiera un mundo ignoto tras aquellas aguas calentorras.

Como siempre, un placer leerte amigo.

Abrazos Dylanianos.

Anónimo dijo...

Joé, si que me gusta MBP. Y fíjate que Dylan hasta me cae mal y todo, porque me parece que desprecia la importancia de cantar bien o algo así. (Bueno, esto seguramente se debe más a una posible inestabilidad psicológica mía), y, si, a pesar de que la hemos tocado juntos yo creo que ya más veces que Thank you girl, que ya es decir, todavía sigue siendo un chute para mí. Pero ¡demonios! basta de hablar de mi, háblame de ti, tontito. El post es aun de más nivel que los anteriores que ya son oros. Toda la historia está hilvanada, y no te sales por ningún atajo, como Alonso, ¿sabes? concentrado toooodas las vueltas del circuito. June recuerda a una postista original, pero eso no importa, es una historia tan tierna como lennoniana.
Y ya me he cansado de hacerte la pelota por hoy. Bueno una pildorilla más: El bizcocho de plátano estaba de puta madre, no sabía demasiado a plátano, te dije que si para que no te durmieras en los laureles.

Wolffo dijo...

UnFos
Sonando: Life on a chain - Pete Yorn
Las motos no tienen secretos, y menos a las velocidades permitidas en USA. Te bastarían 5 minutos para conseguir ese pequeño sueño.
En cuanto al Mar Menor, ya sé que no conociste el mundo ignoto, que lo es por algo, no es un nombre gratuito, pero, ¿no oíste hablar del mito? Seguro que sí, pero te lo callas porque pensaste que era mentira y ahora, ¿qué pensarían tus amigos de la época?
El placer, amigo mío, es completa y magníficamente mío. Ojalá no te canses.
Abrazos Dylanianos, sí.

Buch
Sonando: Take it easy - Eagles
Mira... esta tenemos que montarla, que es buena.
Es verdad que a ti Dylan no te hace demasiado tilín, pero reconoce que muchas de sus canciones, siempre que sea otro el que las interprete, son eternas.
June está inspirada en ella, sí, pero ya sabes como va esto, cojo un poco de aquí, otro poco de allá y se construye así.
Por último, querido amigo: a pesar de tus esfuerzos por velar mi vigilia, me dormí en los laureles.
Un abrazo y gracias, menda y a ver si aprendes a contestar a los amigos como se merecen, que sólo eres guay con las tías en tu blog. Espero que este viernes vengas, porque no sólo yo te espero, txaball. Y podemos hacer un recording o lo que quieras buscar, tío, it's up to you.
Bye!

Anónimo dijo...

Caerse por el lado de fuera es que es muy chungo, yo por eso siempre me caigo para el lado de dentro. Y aquí andamos, disfrutando de la tarde con Nobili Strangelo, el último de su dinastía y el poseedor, por lo que él cuenta, de un falo formidable (y esto que no caiga en el olvido, hombre)

Anónimo dijo...

Mira que tienes la lengua viperina y ráspid, si te muerdes, te envenenas (toma topicazo¡¡¡)

No me extraña que saliera corriendo por piennas al oirte, es que mira las cosas que le dices a una amante recuperada, después de 7 por la noche y 2 por la mañana... no me extraña, la pobre¡¡ pero tú que te crees que somos las señoras, ein? hay que amarnos como quien coge dulces margaritas en la campiña, como el viento besa las amapolas entre los trigales, suave y lentamente, más vale uno bien aprovechao, que... vamos, que sale a uno cada hora y pico, amos que ni la dejaste de dormí, salvaje¡¡ la pobre huyó por falta de sueño, caverníscola¡¡
Y encima le recuerdas el pasado, anorante¡

Ay... Wolffo, 65 años y entodavía no sabes ná de mujeres...

(Oye, que soy Malena, no Malana, que parece marana en japonés...)

Yo también te quiero jojojojojo

Wolffo dijo...

Mot
Sonando: mis dedos en el teclado
sí que es chungo, sí, pero es lo natural si te empujan desde dentro, claro. Hace un rato, me he dado cuenta de donde ha salido gran parte de esta historia. Estaba buscando una tipografía txula para un currele y he pillado una que se llama "Estrangelo Edessa". ¿Qué te parece? Pues nada, hombre, no te parece nada, si ya lo sé...

Malana
Sonando: mis dedos en el teclado
No me había dado cuenta de esa lectura chinesca de este mi, tu, nombre. Pero es una forma de aunar el anterior y el nuevo. Puedo llamarte Malalena, pero parece un bollo equivocado. Sabes, nena, hay una cosa en la que tienes muchísima razón: no sé una palabra de mujeres. Y me temo que así moriré. UN beso grande, Malana

Anónimo dijo...

Bueno, lo primero Felicidades, Buch. No sé cuantos años cumples pero sé que llevas unos cuantos de estrecha relación con este prenda de Wolffo y eso merece una felicitación para ambas partes.

Y por otro lado, si fuera murciana te hubiera mandado directamente a cagar después de leer este post. Porque aquí se toman la tierra muy en serio y no les gusta que se hable mal de sus cosas y de sus playas, ni aunque sea de coña. Pero vamos, que a mí me gusta mucho la sustancia que sueltan tus posts y las hechuras que tienen. No me voy a andar con tonterías.
Menuda tonta del haba, esta June.
El video es genial, por cierto.

Wolffo dijo...

Crispulain,
Sonando: Quando dico che ti amo - Tony Renis
Joé, esta mola, a ver si me animo y la grabo, porque es genial.
Mi querida Crispulina; crees que he dicho algo malo o molesto para los murcianos o Murcia? Yo creo que no, sólo he hablado de Odesa, el pueblo mítico en medio del mítico Ignoto Mar Menor...
Lamentaría que alguien se enfadase, de verdad.
Y créeme: Strangelo no tiene dos pases. Qué mona eres, diciendo eso del video. Un achuchón, Cris.

Anónimo dijo...

Gracias, Cris, apenas cumplo 26. Wolffo no podría ser mi abuelo, pero si que podría ser mi abuela. Pero el asunto es que quería dejar patente que la clase de humor que más me gusta es la que inunda el párrafo sobre el amigo común.

Wolffo dijo...

Buch...
(no suena nada)
Es el mismo sentido del humor que me gusta a mí y detesto, sin embargo, el de abuelo-abuela. No tendré ningún problema (pero ninguno, oye) en enseñarte a ser sutil y realmente gracioso en cuanto te des cuenta de que las personas meyores merecemos respeto y alabanzas por cumplir años, no chanzas lamentables de veintiseisañeros inmaduros... Por cierto, ¿no debería escribirse veintyseisañeros?
Y Cris, desengáñate: no somos amigos, sólo lo fingimos por razones fiscales.

pijomad dijo...

Claro.. encontrarse después de tanto tiempo.. el tiempo parado.. luego sigue... y no os volveis a ver. ¿merece la pena?

Wolffo dijo...

Pijomad,
¿no te parece que "el tempo parecía haberse detenido" es un lugar común infecto?
A mí me da mucha rabia, desd luego.
En fin, trato de pasar página.

Anónimo dijo...

Llegué!

Menos mal que todavía no pasaste página. Bueno, leía después y listo, je. =)

June estuvo muy bien en su respuesta final (y en su huída, claro) El tío era un sapo, y no un príncipe como vos, Wolffo... habráse visto...

Qué lindos te salen los personajes, preciosos...

Besotes! Sigo escuchando, escacharradamente, la canción, culpa de mi escacharrado pc...(no sé por qué me gustan tanto las armónicas...)

Wolffo dijo...

MariRayas
Tú siempre, sea la hora que sea, eres bienvenida. Nunca llegas tarde, porque siempre es una fiesta que vengas.
Me encanta ver que, siempre, tienes algo que decirme, de verdad.
Eres un solete amarillo sobre fondo blanco, con bandas celestes arriba y abajo.
Un beso enorme, Rayas.

linmer dijo...

Me olvidé de comentarte este post en su momento... Allá va:

Magnífica la canción, en serio. Y veo que te has replanteado en serio lo de usar youtube para el audio :P Has probado alguna vez "odeo" (lo q usa el amigo Vania para los podcasts... suena bastante bien, aunque no se como sera para la musica).

Un placer leerte, como siempre ;)

Saludos fugaces

Wolffo dijo...

linmer
Sonando: 68 guns - The Alarm
Sí, ya he pensado lo de odeo, pero no sé cómo coño subir las canciones, tengo que preguntarle al Vanitas-Vanitatis, a ver si me disse. Suena muy bien, la verdad.

Un placer recibirte, créeme. Un abrazo, tío